Fue el 1 de enero de 1999 cuando el euro comenzó a ser la
moneda valida en la Unión Europea; pero en España el euro no llegó a ser la
moneda oficial hasta el 28 de febrero de 2002 cuando desapareció del todo la
peseta.
La entrada de España en la Comunidad Europea permitió
avanzar con el aperturismo iniciado pocos años atrás. En términos económicos,
la suma de exportaciones e importaciones que en 1986 representaba el 35,9% del
PIB llegó al 62,2% en el año 2000. Un cambio de porcentajes que representa la
transición desde una economía que estaba todavía relativamente cerrada hacia un
grado de apertura.
La variación neta de activos y pasivos exteriores en
porcentaje del PIB pasó del 2,2% y 0,7%, en 1986, al 26,6% y 28,8%,
respectivamente, en el año 2000. A su vez, la inversión extranjera directa en
España pasó del 1,4% al 6,6% del PIB durante este mismo período de tiempo,
mientras que la inversión directa de España en el resto del mundo aumentó desde
el 0,2%del PIB hasta el 9,6% del
PIB.
PIB.
Por ello, la apertura al exterior fue imprescindible para el
desarrollo de las economías en el actual contexto internacional y de la
liberalización económica necesaria para la mejora de la eficiencia y el desarrollo
de la innovación.
Comentarios
Publicar un comentario